12 de octubre: Defensa resalta el «orgullo de ser español» en plena crisis catalana

En plena exaltación nacionalista, tanto entre los que piden la República Catalana como los que defienden la unidad de España, el 12 de octubre se convierte en una fecha simbólica, en esta ocasión, para aquellos que quieren celebrar la Fiesta Nacional. Además, la organización de este año está especialmente diseñada para movilizar a más ciudadanos. Habrá un recorrido más largo, participará la Policía Nacional e instalarán dos grandes pantallas en la Puerta del Sol y  en Colón.

El lema escogido (“orgullosos de ser españoles”) este año no deja lugar a dudas sobre la prioridad de esta festividad, que tiene como finalidad “recordar solemnemente momentos de la historia colectiva que forman parte del patrimonio histórico, cultural y social común”, según la Ley 18/1987 que la estableció como Fiesta Nacional de España. Incluso, animan a los ciudadanos a expresarse también en las redes sociales bajo el hashtag #orgullososdeserespañoles.

Esta exaltación coincide con un momento de máxima tensión en Cataluña, después de que el President, Carles Puigdemont, hiciera una declaración política el miércoles en el Parlament, donde asumía un "mandato de que Cataluña se convierta en un Estado independiente".  Si los independentistas han demostrado una enorme fuerza de movilización social durante las últimas semanas, el domingo pasado las calles de Barcelona se llenaron de banderas españolas en una manifestación convocada por Sociedad Civil Catalana, un ánimo que podría contagiarse también en el 12 de octubre. 

Defensa quiere escenificar el apoyo popular a la nación española también en Madrid, por lo que ha diseñado un recorrido más largo que el año pasado, aunque el ministerio asegura que la decisión se tomó antes de que estallase la crisis en Cataluña. En esta ocasión, el desfile comenzará a las 11 horas en la plaza de Cuzco y discurrirá por el Paseo de la Castellana hasta la plaza San Juan de la Cruz. Además de permitir más afluencia de público también mejora la visibilidad del recorrido. Para los que no están en Madrid, también hay previstas más de un centenar de actividades.

También habrá más efectivos que en 2016, año en el que fueron unos 3.500. En esta ocasión, aumentará hasta casi 4.000. Como novedad, este año marchará la Policía Nacional, en una muestra de la buena colaboración con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. De hecho, habrá representantes de los servicios de emergencias. Defensa quiere abrirse a la sociedad civil y estar más cerca de la ciudadanía para que empatice con sus instituciones. Por eso, este año el homenaje a los caídos se convertirá en un recuerdo a víctimas civiles, como las del atentado de Barcelona ocurrido el pasado agosto, con embajadores de las distintas nacionalidades afectadas. También se recordará a Ignacio Echeverría, que murió en el atentado de Londres. Además habrá representantes de la Asociación y la Fundación de Víctimas del Terrorismo. Además, desfilará una representación de 120 agentes de la Gendarmería Francesa y ondeará también la Bandera de Líbano.

En esta oda a la nación española, Defensa quiere hacer memoria y recordar algunos de los momentos más gloriosos de la historia de España. Por ello, habrá una unidad “conmemorativa del camino español” que trasladará a los asistentes a 1567, cuando los tercios españoles en Flandes, al mando del duque de Alba, cruzaron por primera vez de Milán a la ciudad belga de Namur, iniciando así un hito logístico y diplomático que se mantuvo durante 66 años. Serán los únicos que no mirarán al Rey y al grito de “Santiago” contestarán “por España”.

Además de ampliar el espacio, Defensa pondrá dos pantallas gigantes en la Puerta del Sol y en la Plaza de Colón con el objetivo de que los interesados puedan seguir juntos el desfile militar. Aunque en otras ediciones sí ha habido transmisiones, lo cierto es que los recortes presupuestarios de los últimos años habían hecho que desaparecieran.

A las 11 horas llegarán los Reyes, que serán recibidos por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. El Monarca ha sido una de las figuras clave, después de que en su último discurso dejara a un lado su papel de mediador para situarse sin complejos al lado del Gobierno y el Estado de derecho, sin una llamada al diálogo.

Después Felipe VI y la Reina Letizia serán saludados por la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, y el resto de autoridades. Tras los honores militares, inaugurará el desfile el salto de un paracaidista sobre la Plaza de Lima portando una bandera de España, para después continuar con el resto de los actos. Este año, la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, sí acudirá al desfile.