La Diada más tensa: entre la euforia independentista y la preocupación

La Diada que se celebra este lunes en Cataluña promete ser la más tensa de los últimos años, al menos, en lo político. Tras la aprobación de la Ley de referéndum en el Parlament la semana pasada y la posterior suspensión del Tribunal Constitucional los ánimos están más caldeados de nunca. El independentismo, además, aprovechará la manifestación del 11 de septiembre para hacer una demostración de fuerza de cara a la convocatoria del 1 de octubre. Entre la euforia de los líderes independentistas y la preocupación de otros partidos, los catalanes viven este día como una gran fiesta. 

En las últimas convocatorias, el mensaje independentista ha ido adueñándose del Día de Cataluña. El lema de la movilización, convocada por la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultura, este año será ‘La Fiesta del sí’, en referencia a la consulta del 1-O. Según la ANC, este domingo ya se habían inscrito unas 400.000 personas, una cifra superior a la del año pasado, por lo que esperan una asistencia muy alta.

El primero en inflar las expectativas sobre este día ha sido el propio presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que ha pedido que la movilización sea “masiva” para hacer frente a la "ola de amenazas, obstáculos, querellas, utilizaciones de las estructuras y cloacas del Estado". El dirigente ha situado el día de todos los catalanes como la antesala del referéndum del 1 de octubre: “Es clave que, para que sea un éxito el 1-O, en esta Diada Nacional de Cataluña seamos muchos”. Ante los temores de partidos como el PP o el PSOE, el portavoz del Govern, Jordi Turull, ha aprovechado la ofrenda floral a Rafael Casanova este lunes para asegurar que "el Gobierno tiene un problema de percepción de la realidad” y pedir civismo y alegría "por más provocaciones que haya", según informa Europa Press. Lo mismo hizo en el acto la presidenta del Parlament, Carmen Forcadell: "No habrá crispación ni tensión porque el pueblo catalán es pacífico y democrático". 

En los últimos días, la CUP, a través de Carles Riera, ha ido un paso más allá y ha pedido que desde el 11 de septiembre se inicie “una movilización permanente” y haya una “ocupación del espacio público” para presionar hasta el 1 de octubre. Estos dirigentes lo tienen claro: llaman a la desobediencia ante un estado que ha decidido paralizar el proceso en los juzgados.

Los registros que la Guardia Civil ha realizado en los últimos días al semanario El Vallenc y la imprenta Indugraf Offset en busca de documentación sobre el referéndum también han contribuido a tensar la situación, generando el rechazo de políticos catalanes como el diputado de ERC en el Congreso de los Diputados, Gabriel Rufián.

Urnas o tricornios. Viva la gente valiente. pic.twitter.com/v0ie3Z7Ua1

— Gabriel Rufián (@gabrielrufian) 9 de septiembre de 2017

El PSC llama a la calma e intenta rebajar la presión sobre los alcaldes

Desde el pasado miércoles, la escalada de tensión ha ido en aumento. Los días previos, esta batalla entre el Gobierno del Estado y la Generalitat se ha trasladado a los alcaldes: que cedan o no espacios para la consulta será clave para el desarrollo de la votación. Por ello, Puigdemont, además de mandar una carta a los consistorios, llamaba a los ciudadanos a presionar a aquellos Ayuntamientos que no quisieran facilitar la celebración del referéndum y a interpelarles por la calle: “Mírame a los ojos y dime, '¿me dejarás votar o impedirás que vote?'”, dramatizaba el President el pasado viernes. De hecho, ese mismo día se produjeron manifestaciones frente a los consistorios para que accedan a poner las urnas como Tarragona, Lleida o Barcelona. La alcaldesa de esta última ciudad, Ada Colau, ya ha dicho que no pondrá en riesgo a sus funcionarios, aunque, sin duda, Puigdemont intentará persuadirla. Solo hace falta un dato para comprender lo relevante de la decisión de esta alcaldesa: tiene  21% del censo electoral. Según la Associació de Municipis per la Independència (AMI) más de 700 municipios han mostrado ya su apoyo a la Generalitat.

En Ferraz no ocultan su preocupación sobre la deriva secesionista y el PSC ha llamado a la calma en las últimas horas ante las arengas de Junts pel Sí y la CUP. “El PSC sigue haciendo llamamientos para que el president de la Generalitat no impulse acciones contra alcaldes y alcaldesas que quieren cumplir la legalidad”, explican fuentes del PSC. El mismo Miquel Iceta tachaba en Twitter de “irresponsables y temerarias” las palabras de Puigdemont porque, cree, “acabarán provocando insultos y amenazas”.

Uno de sus principales objetivos ahora es rebajar la presión sobre los alcaldes socialistas que no quieran colaborar con el referendum. En Cataluña, el PSOE lidera 122 consistorios. “Si el Gobierno de Cataluña  ha hecho promesas imposibles de cumplir lo que no puede es intentar derivar las responsabilidades en otros”, explicó Iceta este domingo.

Paraules irresponsables i temeràries de Carles Puigdemont. Acabaran provocant insults i amenaces. Cridem a la calma! https://t.co/PlReJnoUrB

— Miquel Iceta Llorens (@miqueliceta) 9 de septiembre de 2017

Por su parte, Pedro Sánchez no ha convocado a la Ejecutiva federal del partido para este lunes, como suele ser habitual. Tras la Diada, el martes el dirigente socialista se personará en Cataluña para participar en un encuentro informativo de El Periódico y después acudirá a un acto organizado por el PSC con los alcaldes y portavoces municipales para abordar la campaña en la que los socialistas catalanes llaman a no votar el 1 de octubre.

.@socialistes_cat engega la campanya #QueNoComptinAmbMi que desaconsella votar sense garanties i conté la proposta https://t.co/0gvA6IQV2L pic.twitter.com/lB34RZOhQG

— Miquel Iceta Llorens (@miqueliceta) 6 de septiembre de 2017

El líder del PSC participará el día 11 con total normalidad  y solo en los actos oficiales. Por tanto, ha acudido a la ofrenda a Rafael Casanova y después se marchará al homenaje a Salvador Allende por el aniversario del golpe de estado en Chile. No acudirá, sin embargo, a la convocatoria independentista.

Podemos: división interna y pública

Al ya de por sí grave problema catalán, Podemos tiene que sumarle también sus desavenencias internas, que son numerosas y públicas. Las diferencias entre Iglesias y el líder de Podem, Albano Dante Fachin, también se harán visibles en la Diada. El dirigente de la formación estatal acudirá a un acto alternativo por una “Cataluña soberana, diversa y valiente”, que organiza Catalunya en Comú y cuyas cabezas de cartel serán Ada Colau, Xavier Domènech y Elisenda Alamany. Este encuentro se celebrará en el Parque de Can Zam de Santa Coloma a las 12 de la mañana. Mientras, Albano Dante Fachin participarán en otra convocatoria en el Passeig de Gràcia. Las dos direcciones se han contraprogramado.

Por una Catalunya soberana, diversa y valiente, nos vemos el 11 en Santa Coloma con @AdaColau @XavierDomenechs y @Elisendalamany ?? pic.twitter.com/Ml6xXYrHV3

— Pablo Iglesias (@Pablo_Iglesias_) 8 de septiembre de 2017

Las diferencias con la dirección estatal no son el único frente que tiene abierto Albano Dante. Podem Catalunya convocará un consejo ciudadano para decidir si deshacer o no la coalición Catalunya Sí Que Es Pot (integrada por diputados de Podemos, ICV y EUiA) en el Parlament. La gota que colmó el vaso fue la intervención del portavoz Joan Coscubiela en la sesión del miércoles, en la que criticaba "actuación antidemocrática sin precedentes" de la cámara autonómica.

“Seguimos apostando por nuestro modelo de una España plurinacional de la que Cataluña no se quiera ir”, explican fuentes de Podemos sobre este acto. En la formación morada son, a diferencia del PSOE,  duros con la gestión que ha hecho Rajoy del conflicto catalán: “No le tenemos ningún miedo a las manifestaciones ni a las urnas. Las expresiones del sentir popular son democracia, pero creemos que lo importante es parar la dinámica de las decisiones unilaterales y que haya un diálogo, para lo que es necesario que el PP salga de la cerrazón en la que se mantiene respecto a este tema”, explican desde Podemos.

Ciudadanos pide "caminar juntos"

“Es una Diada únicamente con contenido reivindicativo, secesionista y nacionalista”, argumentaba el portavoz de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa, sobre la programación diseñada por el Gobierno catalán para el 11 de septiembre.

Ciudadanos ha organizado una marcha en Moll de la Marina (Barcelona) a las 11 horas bajo el lema ‘Caminemos Juntos’ para “reivindicar la unión y la convivencia de España”. A esta convocatoria acudirán el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, la líder de la oposición en Cataluña, Inés Arrimadas, la portavoz en el Ayuntamiento de Barcelona, Carina Mejías, y varios miembros del partido.